
Ante un nuevo 10 de noviembre "Día de la Tradición" fiesta gestada en la ciudad de La Plata e ideada por la Agrupación ‘’Bases’’ en 1937, con sede en el Fortín homónimo, recordamos dentro del patrimonio identitario criollo (que nos une a los eurodescendientes y descendientes de los pueblos antiguos por igual) la figura del Gaucho, figura tangible y tambien arquetipica de culto al coraje, de lo mas cercano al caballero errante en nuestra cultura.
Por igual el gaucho paisano y el gaucho matrero retraran la naturaleza humana que busca la virtud ante las adversidades de la vida como puede y con sus limites.
Pocos dias atras fuimos testigos de una expresion artistica en la feria gaucha de mataderos donde un "gauche"(sic) manifestaba su descontento con la historia gaucha juzgando al pasado con la facilidad que da el presente, utilizando elementos identitarios patrimonio de todo un Pueblo para difundir sus opiniones personalisimas y ofendiendo, seguramente de manera involuntaria, a todos aquellos que elegimos difundir la tradicion como elemento unitivo y lazo invisible para toda la Nacion, siendo nuestra intencion unir y no dividir, unirnos todos, inclusive aquellos con inclinaciones y preferencias diversas que no compartimos pero toleramos. Esa misma tolerancia que es pilar fundamental de toda sociedad no aplica lamentablemente para los que deberian tolerar a la mayoria de la poblacion que no adscribe a estas ideologias pues siendo todos personas humamas y ciudadanos los derechos de las minorias deben garantizarse pero los derechos de la mayoria no pueden ser puestos en discusion.
Como sociedad haciendo un mea culpa hemos fracasado, pasamos de segregar al distinto a integrarlo incondicionalmente y aplaudirle todo; incluso ignorando los propios principios religiosos no negociables y relativizandolo lo que es absoluto.
En tal sentido seguramente los dolores e injusticias vividas por las minorias comprensiblemente llevan a muchos a hacer llegar su grito de dolor, pero utilizando simbolos sagrados o de union de todo un Pueblo no es la manera justa.
Que la Virgen de Lujan cubra con su Manto a todos los nacidos en esta buena tierra y nos recuerde que es consuelo de los afligidos, refugio de los pecadores y Madre de todos.
Ezequiel Toti
Croce Reale int.
Vicepresidente internacional